En el colegio tenemos un lugar especial: agradable, bonito, luminoso y acogedor: el ORATORIO. Un espacio en el que nos reunimos para conocer a Jesús y aprender con Él a rezar al Padre bueno. Creemos que nuestros alumnos pueden crecer conociendo a Jesús y relacionándose con él desde pequeños mediante la ORACIÓN.
Para San Vicente de Paúl pocas cosas eran tan importantes como la oración, porque la oración da fuerza para todo. Él decía: «DADME UN HOMBRE DE ORACIÓN Y SERÁ CAPAZ DE TODO».
Nuestra misión es colaborar para que los niños se encuentren con Jesús y, a través de Él, con Dios. Jesús quiere estar con los niños: «Dejad que los niños se acerquen a mí, no se lo impidáis». A nosotros nos corresponde escuchar, acoger, creer y acompañarles.








